De hecho todo el sistema está planificado para que el domingo por la tarde tengas que encerrarte en tu cueva y olvidarte del mundo. O, más bien, que el mundo se olvide de ti. Si no tienes un puto trozo de pan, o la nevera está despoblada, comprar algo en el pakistaní de enfrente te sale el doble que en los supermercados normales durante la semana. El cine está en su día más caro. Los bares están llenos y los que no lo están te cobran un suplemento por vete a saber tú qué mierda. Los parques están invadidos de molestos e insoportables niños que gritan, corretean y tocan los cojones. Las aceras, por viejas teñidas y menopáusicas que pasean minúsculos perritos peludos. En televisión sólo hay películas que son un coñazo o puto fútbol o insoportables carreras de coche. Por eso pienso que todo está dirigido a que acabe el domingo por la tarde tirado en mi cama llena de pulgas, escuchando mis discos de King Crimson y fumando chocolate o, con suerte, pinchándome en la vena de siempre. Por eso te pregunto: si estás en un sitio que no te gusta, ¿qué haces? ¿te piras de allí, no? Entonces si el mundo te parece una mierda, escápate de él, vete corriendo de él. Y con más razón si es domingo por la tarde.
jueves, 12 de agosto de 2010
Efecto domingo por la tarde / 6
De hecho todo el sistema está planificado para que el domingo por la tarde tengas que encerrarte en tu cueva y olvidarte del mundo. O, más bien, que el mundo se olvide de ti. Si no tienes un puto trozo de pan, o la nevera está despoblada, comprar algo en el pakistaní de enfrente te sale el doble que en los supermercados normales durante la semana. El cine está en su día más caro. Los bares están llenos y los que no lo están te cobran un suplemento por vete a saber tú qué mierda. Los parques están invadidos de molestos e insoportables niños que gritan, corretean y tocan los cojones. Las aceras, por viejas teñidas y menopáusicas que pasean minúsculos perritos peludos. En televisión sólo hay películas que son un coñazo o puto fútbol o insoportables carreras de coche. Por eso pienso que todo está dirigido a que acabe el domingo por la tarde tirado en mi cama llena de pulgas, escuchando mis discos de King Crimson y fumando chocolate o, con suerte, pinchándome en la vena de siempre. Por eso te pregunto: si estás en un sitio que no te gusta, ¿qué haces? ¿te piras de allí, no? Entonces si el mundo te parece una mierda, escápate de él, vete corriendo de él. Y con más razón si es domingo por la tarde.
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3 comentarios:
Nuestro universo es renovable desde lo interno en la forma más inmediata.
Lo externo nos pinta referentes negativos cuando estamos saturados.
Por éso aún en el momento más amargo pasa por la acera alguien que ríe o que celebra. Lo cual no determina que tengan razón de hacerlo,aunque algunas instancias sí son válidas.
He andado por ElMicrorrelatista en la práctica de intentar poner un poco más de desorden en el caos.
Me ha gustado escribir ahí por ser ésa una vía en nuestro idioma,aunque ahora se me ha acumulado trabajo para pasarlo al inglés en themicrostories.
Por aquí estaré pasando.
El domingo por la tarde, tendría que poseer un botón para que todos tuvieran la posibilidad de no hacer nada a su manera. Yo no haría nada que supusiera usar más de dos partes del cuerpo. A la vez.
Salut
Volví a leer éste post y en ésta segunda lectura le encontré teoría conspiratoria dominguera.
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